Día 11 de aislamiento. Dia 8 de estado de alarma. Primer domingo de primavera

Ayer me iba a la cama con la noticia de que una persona que conocía había muerto por el covid19, solo era cuestión de tiempo que nos llegaran malas noticias de gente que conocemos.

Hoy es el primer domingo de primavera y hemos recibido la noticia de que se prorroga el estado de alarma, algo que por otra parte, era evidente con lo que esta pasando estos últimos días, más contagios,más muertos y más saturación en algunos hospitales.
Hoy salia la noticia en prensa que el centro de enfermedades neurologicas de Barros se estaba preparando para abrir y asistir a enfermos de covid19, con lo cual entiendo que se espera una avalancha en los hospitales y mandaran allí a los enfermos, 60 camas, una apertura que predijo Miguel,  entre otras cosas(que por cierto van saliendo), cuando en China ya veíamos que la cosa empezaba a empeorar, de hecho, yo pensando que no llegaríamos a tanto le aposte una mariscada, que por supuesto, voy a perder y que de momento se encuentra suspendida de forma temporal como casi todas las cosas.

Yo por  mi parte, como casi todos estos días, ya me desperté a las 8 de la mañana pero por suerte, me volví a dormir hasta las 10 y 30 de la mañana. 

Después de la rutina habitual de videoconferencia con Miguel, el desayuno y el aseso, me puse a aprovechar de nuevo el estar al aire libre haciendo tareas campestres hasta la hora de comer, momento en el que decidí que iba a dejar de ver las noticias, historias tremendas que dejan a uno con el corazón en un puño, aunque también nos muestran el lado positivo, toda esa solidaridad entre la gente de a pie, aportando su granito de arena.
Por otra parte redes sociales, hablando de política y cada cual defendiendo a capa y espada a su partido, y eso a que viene? perder el tiempo en temas políticos con el marronazo que tenemos encima, es hora de dejar eso de lado, de centrarnos en protegernos nosotros y los que están a nuestro alrededor y dejar de criticar las ayudas que llegan de según que parte, porque ahora lo que toca es salir de esto lo antes posible, y toda ayuda es buena venga de donde venga.
Estamos viviendo una crisis que se esta llevando vidas sin ningún miramiento, gente mayor y gente mas joven, y afectando a nivel económico de una forma que no habíamos visto nunca,  una situación que se convertirá en insostenible a medida que pasen los días, y todavía seguimos dándole a la política como si nos fuera la vida en ello, para no llegar a ningún entendimiento, porque cada uno tiene su opinión y no la cambiara porque por encima de todo esta el partido, y no han entendido que los políticos actúan con un sálvese quien pueda.
Hoy me entere de que la madre de una persona que conozco con 60 años tiene coronavirus, la verdad que me impresiono porque en menos de un día ya he recibido dos noticias de personas conocidas, y aunque he dicho que esto solo era cuestión de tiempo, no es lo mismo saber que el covid19 circula por ahí a poner nombre y saber que es gente que conoces o familiares suyos que están pasando por esta situación tan terrible.
Emplee la tarde en estar en la calle con la peluche, otra vez y seguir con tareas campestres, y preparar todo lo necesario para empezar a pintar,  es algo que me relaja y me sirve un poco de terapia, hacer las cosas que solemos aborrecer hacer o que no hacemos por falta de tiempo, dando un poco de normalidad a la situación en la que jamas creímos nadie que nos encontraríamos un día.
Después de la cena de nuevo videoconferencia con Miguel, al que echo infinitamente de menos, y no veo el día en que salgamos de este aislamiento y estar juntos.
El día termina con un tiempo de meditación y relajación en grupo mandando energía a una persona que en estos momentos la necesita para salir de la enfermedad.

Nunca pierdas la esperanza. Las tormentas hacen a la gente más fuerte y nunca duran para siempre.
Roy. T. Bennet