Día 54 del estado de alarma. Miércoles 6 de mayo

Miércoles 6 de mayo, hoy el día amanece con sol y cielo azul, hoy no madrugo para ir a correr, necesito descansar y que mis piernas se tomen un descanso porque el cansancio es brutal.

Me levanto, me ducho y a desayunar para irme a trabajar, antes de salir de casa, protocolo de rigor, ponerme mascarilla y no llevo guantes porque llevo en el bolso un minibote de gel, creo que me va a resultar mas efectivo que el tema de los guantes.

La mañana pasa bastante rápido, hoy por primera vez en mucho tiempo hablo cara a cara con un compañero de trabajo. Después, de terminar de trabajar, me voy a comprar, seguimos exactamente igual que siempre, oía el comentario de un policía que hablaba de la "gran solidaridad" de la gente(ironía total), mas bien, hablaba de la gran insolidaridad de la gente, de lo burros que somos y de la falta de conciencia de lo que supone este virus que tenemos encima, y me viene a la cabeza la madre de una amiga con veintipico dias en la UCI, cuando despierta no se puede mover, tarda entre una semana y diez días en poder mover un brazo, con rehabilitación para poder moverse y caminar durante un montón de días, dolor de garganta y no puede comer. Lleva dos meses en el hospital, sin contacto con la familia y una vez que sale de la UCI y la llevan a planta su familia no puede visitarla porque sigue dando positivo en las pruebas, y solo le queda a la familia esperar la llamada del medico , día tras día, para ver la evolución de su madre, y cuando esa llamada se retrasa lo primero que se pasa por la cabeza es si se habrá puesto peor y por eso el medico no llama. Y como este un montón de casos más y no todos acaban así, con un buen final, todos conocemos alguien que se ha muerto solo o sola en el hospital por este virus.

Pero nosotros seguimos saliendo a la calle en grupin, porque claro hace tanto que no nos vemos! seguimos sin mascarilla porque como no es obligatoria yo no me la pongo!, salgo mil veces a la calle voy a comprar 20 veces, porque oye hace buen día y total no pasara nada!.

Mientras unos nos preocupamos por tomar todas las medidas oportunas para no contagiarnos y lo que es peor para no contagiar a nadie, porque no sabemos como nos afectara a cada uno de nosotros el virus, y porque no vale eso de que solo afecta a personas mayores o a gente con patologías.

Por que sigo sin entender que clase de imbéciles somos para no ver todo lo que se nos vino encima y lo que se nos va a venir, por no ser responsables y acatar las medidas, luego nos quejaremos del gobierno y de no se cuantas cosas mas pero la culpa es nuestra y de nadie más, por lo menos en estos días y si hay un rebrote esto no solo sera volver al confinamiento, no. Las pensiones ya no estarán realmente en peligro, sino que el sistema de pensiones directamente entrara en quiebra, las personas perderán el empleo, no habrá ERTES, porque no se que nos quedara después, nada.

Yo por mi parte, intento llevar a cabo todas las medidas pero estoy rodeada de gente irresponsable y hay veces que me sube la adrenalina de tal forma que me ponen de tan mala hostia que la impotencia me supera.

Cambiando de tema, salgo de comprar y antes de subir al coche llamo a Miguel, hablamos como si tal cosa, como siempre y cuando llego a mi casa me encuentro con una visita inesperada y que me encanta, es Miguel.

Viene a ayudarme con labores campestres, eso si, con mascarilla y guardando la distancia de seguridad, pasamos la tarde fuera currando un poco y con la peluche, que ve a Miguel después de muchísimo tiempo y le menea el rabo para que sepa que se alegra de verle.

La tarde se nos va en un suspiro, pasamos mucha risa grabando un vídeo para una amiga que cumplirá años dentro de poco, y como no habrá fiesta de celebración, pues toca vídeo. Eso si grabamos con mascarilla y con distancia.

Cuando Miguel se va, me engancho a mi ordenador para hacer alguna cosilla que tenia pendiente, el día ha pasado rapidisimo, no he tenido tiempo de unirme al grupo de meditación y relajación, pero termina con videconferencia con Miguel.

La ciencia debería dejar de analizar la inteligencia animal y comenzar a estudiar la estupidez humana.